El Volcán Nevado del Ruíz, una amenaza latente

Si una persona ingresa en su computador, tablet o teléfono inteligente, al buscador de Google, y coloca nevado del Ruíz en el buscador, y le da click, encontrará en primera línea esta respuesta y/o una muy similar: “El Nevado del Ruiz tiene una historia eruptiva que data del Plioceno, es decir, hace alrededor de 1.8 millones de años. Sin embargo, en la historia reciente, historiadores y literatos del país han registrado tres erupciones volcánicas que han provocado la muerte de más de 25 mil personas.”
Esta respuesta de Google, de primera mano nos informa que al menos dentro del registro que se ha hecho desde el descubrimiento y conocimiento de la escritura por parte del homo sapiens – Mesopotamia y Egipto, hace más o menos más de tres mil años – que los adelantos científicos y la invención de modernos aparatos de medición y análisis volcánico, es factor importantísimo que contribuye a dar mayor precisión en el terreno temporal, al fenómeno de la erupción volcánica.
Bajo este preámbulo, se entiende que los recientes movimientos volcánicos y sísmicos producidos a nivel interno y externo del volcán Nevado del Ruíz, deben ser entendidos y manejados por los científicos expertos del Ministerio de Minas y Energía y del Servicio Geológico Colombiano, quienes tienen el conocimiento y la experiencia para tratar de determinar en qué momento y/o circunstancias, es factible que se produzca una nueva erupción que tenga como consecuencia trascendentes consecuencias para el territorio y los habitantes que hacen parte del entorno de riesgo.
De ahí que la revista COFRADÍA, con el fin de informar y ayudar a prevenir cualquier posibilidad de amenaza, riesgo o tragedia que pueda sobrevenir de una posible erupción del volcán Nevado del Ruíz, se limita a dar la información que como zonas de riesgo e influencia volcánica maneja y oficializa en sus boletines la autoridad nacional, Servicio Geológico Colombiano, y las medidas que con base en esos informes están adoptando o no las autoridades departamental y nacional.
Las zonas de riesgo
El Servicio Geológico colombiano, una vez percibido el aumento de la sismicidad y el posible aumento a fraccionamiento de roca al interior del volcán nevado, hizo público el siguiente mapa de riesgo:

Alerta Naranja
Mediante boletín extraordinario del 8 de abril de 2023, el Servicio Geológico Colombiano, informó que se había ascendido de la Alerta amarilla, a la Alerta naranja, elevándose el nivel de riesgo y prevención:
“ La actividad sísmica asociada a fracturamiento de roca al interior del edificio volcánico continúa localizada en el sector suroccidental del volcán, a profundidades entre 2 y 4 km y a una distancia del cráter similar a las reportadas en días anteriores (2 a 4 km). Ayer, 7 de abril, se registraron 3400 eventos, alcanzando una magnitud máxima de 2,3 ML correspondiente al sismo de las 11:23 a.m. En lo que va del día de hoy, 8 de abril (9 a.m.), se han registrado alrededor de 800 eventos.
“La sismicidad relacionada con el movimiento de fluidos al interior de los conductos volcánicos estuvo asociada a varias emisiones pulsátiles y continuas de ceniza que fueron confirmadas a través de las cámaras web utilizadas para el monitoreo volcánico y por reportes de habitantes en los sectores de la vereda La Cabaña (Murillo, Tolima). La altura máxima de la columna de gases y/o ceniza observada fue de 1500 m, medidos desde la cima del volcán con una dirección de dispersión que osciló entre suroriente y nororiente. La salida de dióxido de azufre a la atmósfera se mantiene en niveles similares a los observados en días anteriores. Se tuvo el reporte de anomalías térmicas localizadas en el cráter Arenas.
“Es importante recalcar, y de aquí en adelante el SGC continuará recordándolo, que la actividad del volcán en NIVEL NARANJA puede fluctuar y por momentos disminuir con respecto a días anteriores, sin que ello signifique que este haya retornado a un menor nivel de actividad.”
La anterior situación se ha mantenido durante los días siguientes, y al cierre de esta edición, la situación no había variado.
El siguiente es el último boletín, previo al cierre de la edición de la revista COFRADÍA. (Ver Boletín)